TCA en la adolescencia: ¿cómo saber si mi hijo (a) ha pasado la línea de lo saludable?
- Centro Neandi
- 24 ago 2022
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 14 dic 2022
La adolescencia es un periodo de cambios y, por tanto, no es inusual que se lleguen a cambiar ciertos hábitos alimentarios. Seguramente muchos experimentarán con estilos de comer diferentes o iniciarán algún plan de alimentación; sin embargo, también puede ocurrir que muchos lleguen a obsesionarse y desarrollar un TCA. Ante este panorama, como padre de familia, probablemente te preguntes: ¿cómo puedo saber si mi hijo (a) ha pasado la línea de lo saludable? En este espacio encontrarás herramientas importantes para reconocerlo.
En primer lugar, es importante observar los siguientes comportamientos, los cuales podrían estar indicando un problema con la alimentación y/o la imagen corporal:
Interés excesivo por el aspecto físico y/o un miedo intenso a subir de peso. Principalmente, se puede detectar en la forma en que se expresa sobre si mismo (a), conversaciones constantes sobre el peso y la comida, admiración extrema a alguna celebridad con un “cuerpo ideal” y comparaciones constantes de su cuerpo con el de otras personas.
Comportamientos alarmantes relacionados con la conducta alimentaria como: comer demasiado rápido o lento, utilizar dietas restrictivas o ayunos prolongados, observar gran indecisión al elegir alimentos y/o pensar excesivamente en la comida, esconder alimentos y/o evitar ciertos alimentos, detectar sentimientos de culpa después de haber comido.
Cambios en el carácter como mayor irritabilidad, angustia o tristeza. Así mismo, cambios en el comportamiento con los demás; por ejemplo, evitar situaciones sociales relacionadas con la comida y/o otras conductas de aislamiento social.
Realizar ejercicio físico de forma excesiva, el cual se observa en conductas como: cansancio excesivo, continuar con el ejercicio a pesar de la existencia de alguna lesión o dolor, tener un horario inflexible en el que no se permiten faltar, si su rutina de ejercicios ha reemplazado o interfiere con su vida social.
Ahora bien, lo más importante para diferenciar entre una conducta normal y una problemática se responde con la siguiente pregunta: ¿qué tanto la conducta alimentaria de mi hijo (a) está causando consecuencias negativas con la familia, escuela, amigos y/o consigo mismo? Si llegas considerar que su comportamiento con la comida está causando un malestar significativo en cualquiera de las áreas mencionadas, entonces se estaría tratando de una señal de alerta que requiere de acción.
¿Qué hacer si sospecho que mi hijo (a) tiene un TCA?
Si llegas a observar comportamientos de riesgo en tu hijo, recuerda que entre más pronto reciba atención más sencilla será su recuperación. Al obtener ayuda profesional con anticipación, se pueden evitar los riesgos en la salud física y psicológica que conllevan los trastornos alimentarios. En Neandi, estamos especializados en el tratamiento de problemas relacionados con la alimentación y podemos ayudarte.
También, es muy importante brindarle a tu hijo (a) la seguridad de ser amado (a) y que cuenta con su apoyo durante el tratamiento. Sentirse seguro (a) y aceptado (a) ayuda a crear una base sólida para que el comience a aprender nuevos hábitos saludables y pueda vivir en bienestar.
María Linares

Photo by cottonbro
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