Aquí seguimos: Sofía pequeña, Sofía adulta y su perra Rima. Tenemos un sistema nervioso desregulado que no logra dormir bien por las noches. Le dan picos de ansiedad o estrés durante el día, y luego un profundo sopor o cansancio. La vida moderna.
Mi terapeuta me acaba de dar la instrucción de dejar de leer contenido sobre trauma. Resulta que mantenerme al tanto de todas las afecciones mentales, tanto las propias como las del mundo, más que darme herramientas, me estaba desregulando. Llevo un poco más de tres días sin chequear estos contenidos, y justo, la primera mañana, al preparar mi desayuno, oí clarito al pensamiento pasar: “¿Ahora con qué me torturo?”
Las personas tenemos, a veces, ese terrible hábito masoquista de autodirigirnos castigos a diestra y siniestra, por una profunda sensación de inadecuación. Como si con suficientes regaños y castigos nos fuéramos a sacar del hueco existencial en el que fuimos a caer. Y no, seguramente, esto sólo hace más profundo ese abismo.
Me salgo. Por suerte, de los abismos mentales se puede salir así nomás, con una que otra cuerda, pero rápidamente. Se requieren herramientas, sí, habilidad, sí, pero la mente puede hacer un viaje de lo negro a lo gris, rápidamente. Ahorita, ahí estoy, en lo gris.
Sigo empujándome a lograr cosas, y las voy logrando, pero me falta algo, eso que siempre me faltará y por lo que aún estoy insatisfecha. Ayer grabé una canción, cosa que tomó meses de composición y ensayo, y me siento muy bien por haber llegado ahí. Pero hoy estoy agotada y me preocupa, porque mi voz vigilante me dice que debería estar consiguiendo trabajo.
Este mes aún estoy contratada, pero dentro de un mes seré desempleada, si nada viene a mi encuentro. Ya he mandado varias solicitudes y me han rechazado por varias razones. Estoy esperando ahora la respuesta de la que más me importa y mandando a otros lugares. El mundo laboral es tremendo. Yo, quiero salir corriendo, regresar a la preparatoria o algo así. Cambiar el sistema. Siento que me voy a morir de hambre… lo peor de todo es que sí pasa, y en grandes partes de la población. Por esto, mi terapeuta me pidió dejar de leer sobre trauma (u otras noticias que me desregulen).
¿Será que sólo podremos sentirnos mejor con una venda en los ojos, o es simplemente un temporal descanso, una meditación, para volver al mundo, una vez que mi cuerpo esté más en equilibrio, una vez que no peligre mi manutención, una vez que pase este episodio de Rima?
Commentaires